El Tipo es un vehículo simple, que no pretende descollar por su sofisticación sino más bien ofrecer mucho espacio para transportar personas y su equipaje, con un confort correcto. Para ingresar al mismo, se dispone de una llave tradicional tipo navaja, con comandos a distancia. Una vez en el habitáculo, se observan unas butacas confeccionadas en tela de diseño simple y con una sujeción lateral sutil, que no están pensadas para contener al cuerpo en maniobras bruscas. El conductor dispone de las regulaciones tradicionales en el asiento, que se efectúan de forma manual y a las que se le suma el ajuste lumbar, que es eléctrico y cuya presencia es destacable ya que eso facilita el sentirse más cómodo en viajes prolongados. El volante por su parte se ajusta en altura y en profundidad, pero con la salvedad de que le faltaría más recorrido en cuando a la regulación en profundidad, ya que en la posición más alejada del conductor parece estar algo cerca. Al interactuar con los diversos materiales del interior, se podría decir que transmiten simpleza, pero a la vez una calidad constructiva a tono con el segmento al que pertenece el vehículo, que no es poco decir. No se advierte sofisticación, sino más bien coherencia. Hay plásticos blandos y es placentero interactuar con los comandos, selectora de cambios y el volante. Un detalle que advertimos es que el comando de la luz de giro es muy sensible y provoca que el conductor termine realizando guiños de luces altas involuntarios al activar la luz de giro izquierda; también detectamos esto en otros vehículos del grupo, como el Renegade. En cuando al diseño interior, se aprecia un torpedo con una consola central de diseño clásico, que no sorprende pero que convence por ser convencional. Quizás sea justo decir que la sofisticación de las líneas exteriores no se replicó en el interior, que luce más conservador. El aire acondicionado del vehículo, además de ser automático de una vía, es sorprendentemente potente, ya que enfría con una contundencia y una facilidad notables (fue probado bajo muchísima exigencia, y respondió de maravilla); se nota que Fiat le puso especial atención a este apartado. No dispone de salidas para las plazas traseras, pero al ser tan potente refrigera el habitáculo sin problemas. En cuanto a los elementos de confort, se destaca la presencia de luces y limpiaparabrisas automáticos, control de velocidad crucero, espejo electrocrómico y pack eléctrico; de las cuatro ventanillas, solo la del conductor tiene función de un toque para subir y bajar, mientras que la del acompañante solo tiene un toque para bajar y las traseras no disponen de ninguna ayuda. No ofrece techo solar, espejos abatibles automáticamente, global closing, tapizados de cuero o climatizador bizona, por mencionar algunos elementos disponibles en la competencia. La caja es automática y eso eleva el confort para circular en ciudad. El equipo de audio es muy bueno, ya que sorprende con una calidad de sonido realmente muy agradable (tiene seis parlantes). La iluminación interior es correcta, con plafones independientes para las plazas delanteras y traseras. La dirección es muy confortable y además cuenta con una función especial denominada City que se puede activar para aumentar aún más la asistencia para circular a bajas velocidad en la ciudad y realizar maniobras de estacionamiento, haciendo que manejarla con este modo encendido sea realmente una delicia. El confort de marcha es correcto, pero las suspensiones no se caracterizan por ser mullidas, sino más bien están seteadas en un punto medio. Sin embargo, el Tipo absorbe con contundencia imperfecciones bruscas del asfalto y empedrados desparejos sin chistar. Por último, la insonorización del ruido a los neumáticos y al viento en la ruta se mostró correcta, aunque ambos se dejaban oír levemente en el interior; el ruido al motor, por su parte, sí inundaba más el habitáculo cuando el régimen de giro se elevaba. En líneas generales, quizás esté un escalón por debajo de los modelos más representativos del segmento en este apartado.
Consejo: Si buscás un auto cómodo, simple y de materiales que transmitan una buena calidad, el Tipo va a satisfacerte. Su equipamiento de confort es suficiente, aunque tiene faltantes respecto de sus competidores. El andar es muy equilibrado pero la insonorización es un apartado en el que podría ser aún mejor.