¿Qué es? El (muy) anticipado primer auto «nacido eléctrico» del mega grupo VW, que puede leerse en clave «Golf eléctrico».

Target: Dar el primer paso hacia la electrificación de la marca, que promete una flota casi 100% eléctrica para 2025. Además de empezar a atraer consumidores techie y eco-friendly a VW, tiene la misión de lavar la cara de la empresa luego del escándalo del dieselgate.

¿Qué hay de nuevo? Hay varias opciones, que van de los 126 a 204 CV, con autonomías de 330 a 550 km según ciclo WLTP. Es para cinco plazas, excepto la versión de mayor autonomía en la que se empleó la quinta plaza para alojar más baterías. El baúl es de 385 l y la habitabilidad es destacable gracias al piso plano. Adentro casi todos los comandos son táctiles, incluyendo los del volante. Y, si bien todavía no lo ofrece, en teoría el auto está equipado de todo el instrumental necesario para ofrecer conducción autónoma nivel 3.

Primera impresión: Muy convincente. Está en un punto medio entre un look novedoso, pero no tan drástico como para no espantar clientes. Muy interesantes el formato monovolumen, para aprovechar la plataforma eléctrica, y el interior super minimalista.

¿Llegará a la Argentina? No.