¿Qué es? Un nuevo hatchback compacto que reemplaza al (poco exitoso) Spaceback. Comparte plataforma con el VW Golf y el Audi A3.

Target: El mismo que el de sus «primos-hermanos» (VW) Golf y (Seat) León: conquistar el corazón del típico usuario racional europeo que sigue eligiendo hatchbacks medianos para transportarse.

¿Qué hay de nuevo? Se destaca por su amplio espacio en las plazas traseras, por su baúl y por una relación precio-producto muy atractiva. Los motores pueden ser diesel o nafteros, de entre 90 y 150 CV. El más potente puede desconectar dos de sus cuatro cilindros para ahorrar combustible. El paquete de ADAS es muy completo. Como curiosidad, ofrece un sistema de suspensión de dureza variable y lo que Skoda denomina las “air curtain”, una especie de cortina laminar de aire que se crea para los laterales del coche que mejoran su Cx.

Primera impresión: Tan intachable como genérico. El Scala será sin dudas un producto óptimo, tanto como lo son sus primos hermanos de Seat y VW. Salvo por las pequeñas variaciones de precio, es difícil entender donde reside lo diferencial en cada uno.

¿Llegará a la Argentina? No.