¿Qué es? La actualización del crossover urbano chico (segmento B) de Renault que se vende desde 2013 en Europa.

¿A qué apunta? A refrescar el modelo con leves ajustes estilísticos y con el agregado de equipamiento que le permitan mantener el liderazgo de ventas en su segmento en Europa, donde está cada vez más amenazado por sus rivales (Peugeot 2008, Opel Mokka, Toyota CH-R…).

¿Qué hay de nuevo? Pequeños cambios en el diseño y la introducción de elementos de tecnología y equipamiento. La parrilla es levemente distinta y ahora hay una tira cromada que la recorre transversalmente; en la parte inferior de los paragolpes delanteros y traseros se observan leves modificaciones. Los faros sí son nuevos y ofrecen el sistema Led Pure Vision, mejorando la iluminación y el look tecnológico de la Captur; incorpora, además, la luz diurna en forma de C alrededor de los faros antiniebla. En su interior se encuentra un mejorado sistema R-Link compatible con Android Auto y respaldado por Bose, sumado a la posibilidad de contar con techo panorámico fijo, detectores de punto ciego en los espejos laterales, sensores de estacionamiento delanteros, cámara trasera y estacionamiento asistido. Se sigue construyendo en España sobre la misma plataforma del Clio y mantiene su distintiva pintura bitono.

Veredicto Miura: Pocos cambios, pero acertados. El exterior del vehículo continúa luciendo muy atractivo, dinámico y moderno. Las modificaciones introducidas van en línea con el family feeling de los SUV de la marca, especialmente el de la Kajdar. Y los agregados de equipamiento le proporcionaron argumentos renovados para poder dar batalla en el tan reñido Segmento B europeo, caracterizado por un altísimo nivel de seguridad y confort en todos sus contrincantes.

¿Llegará a la Argentina?  No, porque en nuestro mercado se vende la Captur basada en la Duster y que se fabrica en Brasil.