¿Qué es? Una especie de Civic original de 1972 proyectado hacia el futuro eléctrico.
¿Qué hay de nuevo? Un lenguaje estilístico simple y fresco, que rompe totalmente con las formas agresivas y robóticas que Honda viene mostrando en sus últimos productos.
Veredicto: ¡Hermoso! Es el auto que se robó el corazón de todos los diseñadores en el Salón de Frankfurt, y una prueba de que se puede proyectar una idea de modernidad con líneas simples y amigables.
¿Pasará a producción? Definitivamente no, pero quizás marque tendencia en la búsqueda del estilo de los autos eléctricos de Honda.