Francia

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El paso de Marcelo Bielsa por algunos clubes de “le championat” intensificó el estilo vertiginoso y ofensivo plasmado en Rusia: 3-4-3.

ALLONS ENFANTS DE LA PATRIE! Destapé uno de mis mejores vinos, me coloqué el característico “chapeau de bras” de Napoléon y me senté a diagramar este equipo sobre un viejo tablero de T.E.G cubierto de polvo: creo que no hace falta aclarar qué es el TEG ¿no? La fase “Waterloov o Waterlooski” (como gusten llamarla) está iniciada y mis tropas desfilan por Champs Elysees para despedirse del público parisino.

El paso de Marcelo Bielsa por algunos clubes de “le championat” intensificó el estilo vertiginoso y ofensivo que plasmaremos en Rusia: 3-4-3.

El arco del triunfo estará protegido por las manos del debutante Citroën C5 Aircross: confiamos en su frescura y versatilidad. Estará custodiado también por una saga de tres exponentes del Grupo PSA. De central, el refinado y tecnológico Peugeot 3008 que con sus diversos sistemas de seguridad activa y pasiva puede detener lo que se le cruce. En un extremo, estará acompañado por el excelso DS4, mientras que la otra banda la hará el fresco Citroën E-Mehari. Apuesto a su torque y jovialidad: él sabe muy bien que debe hacer hasta quemar baterías: si se cansa, tiene un reemplazo utilitario con mucho oficio (Mercedes-Benz Citan).

La “Grande Armée” del medio campo conforma un bloque de cuatro de nuestros mejores ejemplares. Todos muy combativos y con improntas disímiles, pero que se complementan a la perfección. El doble cinco tiene forma de rombo: Renault Clio como perro de caza, metiendo y haciendo el desgaste para que el Renault Tallisman se ocupe exclusivamente de generar fútbol, con su gran clase. Este binomio estará cortejado por dos mariscales a sus costados. A la derecha, la presencia exquisita del nuevo Peugeot 508. Audaz y elegante, tiene visión periférica de juego única, gracias a su i-Cockpit que le permite cubrir todos los flancos del juego. En tanto, la banda izquierda estará ocupada por la izquierda por el tapado de la lista, Toyota Yaris. Debo confesar que a este último me lo impuso el periodismo. Si bien no tiene sangre 100 % gala, el “oriundo” de Valenciennes-Onnaig es el modelo más fabricado en las factorías francesas durante los últimos años, por eso se ganó el corazón de la gente y es considerado el “jugador del pueblo”.

Arriba, toda la carne al asador, pero vuelta y vuelta. Jerarquía, lujo e historia. Mis tres mosqueteros conforman, sin dudas, una de las delanteras más temibles en la historia de los mundiales. La diez que supo vestir Zinedine Zidane la ocupará ahora el Alpine A110. Un jugador emblemático que encarna, a su manera, la nostalgia de las mejores épocas del fútbol francés. El extremo derecho, el exquisito DS 7 Crossback. Es una de las más recientes apariciones de “le championnat”. En este mundial promete estar a la altura de las expectativas. Pero la munición gruesa sale del “pornográfico” V8 de 1.500 CV de potencia que atesora el nueve de este equipo. Como él, ninguno. ¡Qué Aventador, LaFerrari ni ocho cuartos! Bugatti Chiron es el candidato número uno a llevarse el balón de oro ¿o acaso algún otro supero 458 km/h de máxima? ¡Allez les bleus! / AC

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