¿Qué es? Un microcoche biplaza y eléctrico que puede circular hasta 45 km/h (no necesita licencia de conductor). Ideal para el car sharing.

Target: Le apunta al –siempre esquivo pero con enorme potencial–mercado de la micromovilidad urbana. El mismo que el Renault Twizzy, que nunca logró convertirse en un producto masivo.

¿Qué hay de nuevo? Mide solo 2,41 m de largo, y en algunos países será considerado como un “cuatriciclo”, por lo que solo requerirá carnet para ese tipo de vehículos. Tiene un motor eléctrico de 8 CV que le permite alcanzar los 45 km/h y 70 km de autonomía. Solo estará disponible en “Azul Ami”, pero será posible personalizarlo con molduras decorativas. Además, tiene muchos portaobjetos y hasta techo panorámico para disfrutar del viaje.

Primera impresión: Aun siendo menos «lindo» que el concept que lo anticipó, es fantástico. Este tipo de productos rupturistas son los que le pueden devolver a Citroën el aura de marca innovadora y vanguardista. Ojalá que tenga éxito, porque es lo que el mundo necesita.

¿Llegará a la Argentina? No.